viernes, 18 de noviembre de 2011

El último deseo de Rachel: Calmar la sed en África.

Rachel Beckwith/AP

Rachel Beckwith no quería regalos por su noveno cumpleaños. Quería llevar agua a África. Había descubierto, a través de su iglesia, que millones de niños en ese continente no llegan a los cinco años porque no tienen acceso al agua potable y quería reunir 300 dólares simbólicos de ayuda. "Así que voy a celebrar mi cumpleaños como nunca antes", escribi en la web que creó para recolectar el dinero. "Le pido a todos mis conocidos que donen dinero para mi campaña en vez de hacerme regalos".
El 12 de julio, día de su cumpleaños, esta niña del estado de Washington casi había conseguido su objetivo. Una semana después, entró en coma. Rachel iba en uno de los 13 coches que colisionaron en la autopista 90 de Bellevue ese miércoles.

A los pocos días, murió en el hospital.

La tragedia dio entonces un giro esperanzador: el pastor de su iglesia volvió a abrir su web y los 220 dólares que había reunido por su cumpleaños empezaron a multiplicarse. Primero fue gente de su localidad; luego, de otros estados; más tarde, de otros países. El miércoles por la tarde, 10.000 personas habían donado la friolera de 400.000 dólares en honor a Rachel.

Calculan que con 20 dólares se puede proveer a una persona de agua potable durante 20 años. Según estas cifras, Rachel habría cambiado, sacrificando su cumpleaños y, por desgracia su vida, hasta 20.000 vidas.

Página: http://mycharitywater.org/rachels9thbirthday

No hay comentarios:

Publicar un comentario